EVOLUCIÓN DE LA SIERRA MADRE ORIENTAL, NE DE MÉXICO A TRAVÉS DE CAMBIOS CLIMÁTICOS, DE LA CONFIGURACIÓN GEOTECTÓNICA Y LOS PROCESOS SEDIMENTOLÓGICOS.
El Noreste de la Sierra Madre Oriental ha sido sede de increíbles cambios geológicos. En donde los principales cambios se han documentado en el Jurásico Medio, el Jurásico Tardío, el Cretácico Temprano, el Cretácico Tardío/Paleoceno y finalmente en el Plioceno/Pleistoceno. Debido a estos cambios se analizarán y compararán las diferencias climáticas por medio de procesos sedimentológicos, así como, la influencia por parte de procesos geotectónicos. A partir del Jurásico Medio, se abre camino la separación de Pangea, formando altos como el Bloque de Coahuila y el Archipiélago de Tamaulipas, de los cuales el ultimo marca la barrera entre el Pacífico y el Golfo de México. En el Jurásico Tardío, se observa la profundización de cuencas y formación de lagunas marinas someras con el aumento de niveles marinos. Finalmente se conectan el Atlántico Norte y el Golfo de México. Para el Cretácico Temprano, se cambia el patrón de la sedimentación con la conexión al mar de Tethys y formación de arrecifes alrededor de los Bloques levantados. Regresiones y transgresiones dominan la configuración paleogeográfica. Los testigos de esta sedimentación se reflejan hasta el día de hoy en los rasgos morfológicos de la Sierra Madre Oriental. Durante el Cretácico Tardío, la transgresión global debido a la formación forzada de corteza oceánica en combinación con el inicio con la Orogénesis Mexicana cambia drásticamente la geometría de la cuenca. Finalmente, la historia más joven de la región está documentada en sedimentos terrestres como depósitos lacustres o fluviales que documentan la interacción climática de la Sierra Madre Oriental y su foreland.